Páginas

miércoles, 31 de enero de 2018

Jugando en Yahoo Japan

Un español infiltrado entre los Japoneses


El reto para registrarse es sacar el captcha japonés. Es complicado porque no solo son letras japonesas sino que salen deformadas. Pero aquí estoy yo para echarnos una mano en la tan árdua tarea de conseguir averiguar el captcha Japonés del registro. Si bien me he tirado casi 2 horas mirando por wikipedia tratando de traducir las letras japonesas, he encontrado un sitio mejor para conseguir sacarlo. Antes, os linqueo la página de Othello Japan Yahoo para que podáis registrar un nick y empezar a disfrutar junto a nuestros queridos amigos del este. 

La página web que he puesto en la descripción del vídeo parece que ya no existe, la han borrado, pero no tenemos más que buscar "Hiragana" en google imágenes y no tardaremos en dar con unas cuantas fotografías donde podremos intuir cual es la letra correcta. Desde wikipedia también se pueden copiar y pegar, aunque es difícil, no es imposible.  Es importante darnos cuenta de que las letras son menos de las que hay, debemos identificar las que son, ya que suelen ser casi siempre las mismas.

En cuanto a la página, me recuerda mucho a Playok, en cuanto a la estructura de la misma, con el listado de jugadores en la derecha y el listado de partidas en la izquierda. Me imagino que una u otra se debió hacer inspirada en la misma. Antes de seguir leyendo me gustaría dejar constancia de que todas las averiguaciones que he hecho acerca de la página muy probablemente no sean muy precisas, ya que al estar en Japonés, hay muchísimas cosas que no he podido comprobar.

Hecha esta aclaración, como novedades importantes a destacar: 1- El nivel es muy bajo, (contrariamente a lo que se podría pensar) lo pondría en un nivel medio entre Ludoteka y Fly or Die. 2- El Elo es acumulativo, es decir, parece que no hay tope, por lo que si juegas suficiente, acumulas 30mil puntos de Elo. Esto desincentiva claramente crearse nuevos nicks, aunque no revela mucho acerca del verdadero nivel. 3- Parece que podemos customizar nuestro "personaje" al que le podemos poner ropita y no se si hasta cara nueva. Parece que no se puede hacer gratuitamente sino que hay que pagar para obtener dichos items. 4- Cuando tomamos una esquina un sonido nos lo indica. 5- Se rumorea que a los japoneses no les hace gracia jugar contra occidentales en esa página web.


Por lo demás creo que en los vídeos queda en este caso más claro el funcionamiento de la página, por lo que considero que no merece la pena extenderme más acerca de ella. Me parece una idea muy chula e innovadora lo de ver la fotito en directo de contra quién estemos jugando (aunque sea un dibujo) y tiene detalles que me gustan, como los perfiles donde podemos poner bastante información.

viernes, 26 de enero de 2018

Estrategias Avanzadas - Capítulo 4

Capítulo 4: El contraataque de lateral Diagonal


-¿Quieres que tome la esquina? Le pregunta blancas a negras tras la hipotética jugada de negras en el X square de abajo a la izquierda. Negras le replica: -sí, no solo no puedes acceder aun, sino que cuando puedas acceder, me haré fuerte abajo y te cederé el lateral derecho que tanto quieres, forzándote a salir por la derecha que tanto odias. Entonces blancas hace la jugada maravillosa: Juega la vertical B8 y le replica a negras: -Tómala, no la quiero.

Tras este diálogo se esconde una jugada relativamente habitual del othello. En primer lugar, el contrataque de negras por el X square opuesto del mismo lateral, dando por perdido el lateral izquierdo, contrarrestado con el movimiento olvidado, la vertical blanca para que negras tome la esquina y el lateral blanco sea todavía, más blanco si cabe. Sin embargo y con esta jugada en mente, el tempo es importante y en este juego yo decidí salirme arriba a la izquierda.

Y es que el ataque de blancas que planteo al final, mover abajo B8 para conseguir el lateral izquierdo, es un movimiento demasiado simplista y demasiado sencillo de preever para blancas, incluso tratándose de un jugador principiante, por lo que mi ataque carece de lógica si en el movimiento siguiente blancas puede desactivarlo. En el othello, a menudo los movimientos sencillos son la mejor solución, pero cuando son tan sencillos como para que tu rival los prevea y contrarreste con la misma sencillez, suelen ser un mal plan de juego final.

Ya a partir del minuto 4 del vídeo comento como en una partida rápida, mi idea obstinada de terminar en la región inferior derecha conservando esa paridad, es la que me hace perder el juego. Si contamos, hay 7 casillas vacías sin contar las de debajo a la derecha. Por tanto yo contaba con mover 2 veces y terminar el juego ganando.

Pero precisamente en ese punto blancas ejecuta correctamente el jaque mate y poco más hay que decir. No sale por donde quiero y me deja con una frontera negra por el noreste, obligándome a tomar la posición igualmente del sur a la derecha. De nuevo, valoraciones en partidas rápidas que no deberían revestir mayor importancia. No obstante he querido compartir este vídeo para darle más énfasis a la típica jugada de vertical, que sirve de contraataque cuando se disputa un lateral con una Diagonal previa.

miércoles, 24 de enero de 2018

El esfuerzo justo

Just Effort

El otro día me puse a jugar con un jugador inglés muy bueno, como de 1800 puntos de Elo en Playok. Tras ganarme varias partidas, me levantó de la mesa y me dijo que necesitaba a otros rivales más "strongs" ya que yo era demasiado "weak" para él. Realmente a mi no me importa perder, pero sí que al menos me parece honorable o me proporciona cierto orgullo o satisfacción que a mi rival le cueste batirme. Me parece alabable que un jugador que dedica horas a estudiar aperturas o que simplemente lleva muchos más años jugando al othello que yo, le cueste ganarme. En parte es natural: una de las características y de la gracia del othello es que resulta incluso complicado ganar sin esforzarse a cualquier novato que incluso tenga unas nociones básicas del juego. Más aun en partidas a 1 minuto. Así que cuando me dijo que yo era demasiado débil para él por el simple hecho de perder 2 o 3 partidas seguidas, me molesté y no me terminé de creer que le hubiera sido fácil ganarme así que le pregunté: "really you win me easy?" a lo que él me contestó que sí. Yo le comenté que únicamente le habían sobrado 2 segundos en una de las veces que me había ganado, (lo que me hacía sospechar que en realidad no había sido tan fácil) a lo que me contestó con lo de: "just effort", o algo así. Más o menos en español viene a querer decir que me ganaba con el "esfuerzo justo". Yo le contesté: "Just effort? like does Foompykatt with you?" ya que mientras hablábamos estaba mirando su historial de partidas y justo antes había perdido unas 20 partidas seguidas contra Foompykatt (Ben Seeley). El jugador me expulsó de la mesa de inmediato sin decir nada, supongo que se pudo sentir molesto por mi comentario, aunque él se lo había buscado :-D

Después de esta conversación llegué a comprender realmente lo que quería decir ese jugador con lo de "just effort". El esfuerzo justo. Y es que estaremos de acuerdo en que podemos jugar partidas de othello con más o menos negligencia. Podemos aplicar más o menos concentración, más o menos atención en cada movimiento. Una de las claves quizá para mantener un esfuerzo elevado, puede ser jugar muchas partidas a 1 minuto seguidas. Concluí que es más complicado esforzarse al 100% en una partida a 20 minutos que en un juego a 1 minuto. 

La conclusión la he venido redactando en otros artículos acerca de los juegos a 1 minuto: cuando llevamos muchas horas jugando, simplemente no nos apetece jugar igual y cometemos más errores. A veces, las partidas a 1 minuto algunos jugadores las asimilan como "trash-games" (juegos-basura) y simplemente es un sistema que ellos siguen para no ponerse nerviosos. Juegan con el "esfuerzo justo" y no se preocupan a veces de determinados movimientos porque a continuación vendrá otro juego y la posibilidad de revancha inmediata. Sin embargo, el "just effort" tiene menos sentido aplicarlo en una partida a 20 minutos. Dichas partidas pueden terminar durando 40 minutos, casi una hora. ¿Ibas a dedicar casi una hora de tu vida a una partida y encima jugarla relativamente mal? Lo lógico es que a mayor tiempo de la partida, mayor esfuerzo apliques. Aquí viene otra consecuencia: algunos jugadores se ponen muy nerviosos cuando se esfuerzan, motivo por el cual y como defensa psicológica, simplemente no se esfuerzan al 100% para evitar comprometerse demasiado con el juego y que los nervios terminen por devorarles. Así que juegan partidas a 1 minuto dando el 70-80% de sus capacidades: el just effort. (Eso explicaría también por qué muchas veces incomprensiblemente un jugador de 1800 puntos de Elo cosecha un parcial de 20 a 0 contra un jugador de 2100 puntos de Elo, cuando no debería existir tal diferencia, de hecho yo mismo no acostumbro a cosechar tal parcial contra dichos jugadores y no tengo un Elo superior a 1600. Eso podría explicarse porque yo sí intento dar el 100% en partidas a 1 minuto, mientras que otros jugadores no).

Luego, (u otro día más extendidamente), ya entraré a debatir sobre la absurdez de que un jugador porque gane varios juegos a 1 minuto (incluso a 5), se crea realmente mejor jugador de othello que su rival, pero este no era el motivo del artículo de hoy. Hoy quería relacionar como el nerviosismo juega malas pasadas a algunos jugadores. Mientras yo me pongo nervioso a 1 minuto cuando veo que me quedan 10 segundos, a otros jugadores eso no les importa, pues podemos ver bastantes a los que se les acaba el tiempo constantemente porque para ellos esas partidas carecen de importancia y no se esfuerzan ya que simplemente para ellos son trash-games. En ocasiones directamente no se esfuerzan porque desconfían del rival, como en el vídeo que muestro en este artículo, en el que vemos a un jugador oscuro un tanto sospechoso.

El día que jugué con ese chico fue otro de esos tantos que dije: "último día en mi vida que juego juegos a 1 minuto, para despedirme". Pero es que estos juegos pienso que son como una inyección de heroína, al menos para mi. Quise jugar 20 minutos y terminé jugando 3 horas. Ni me di cuenta de que había pasado hora y media jugando con distintos rivales. Probaba aperturas y jugaba juegos y más juegos. Cuando ya me iba veía a un jugador: "anda, este tiene 1550 puntos de Elo, voy a jugar con él que es bueno y es difícil jugar con alguien así", y al cabo de 30 minutos tras jugar con él cuando ya me iba veía a otro: "anda, pero si este chico es español, voy a jugar con él un rato" y cuando había pasado casi otra hora jugando con un amigo español... Y así sucesivamente durante 3 horas, cuando mi idea inicial era jugar 20 minutos. Tremendamente terrible. (Hace no tanto el dolor de espalda y los mareos me recordaban que llevaba una hora jugando, pero una silla ergonómica, una buena mesa y mucha natación han potenciado mi espalda, por lo que ahora puedo aguantar bastante más de una hora sin sentir molestias).

Así que personalmente debo tener autocontrol para no jugar juegos a 1 o 2 minutos, juegos que por otro lado, no estoy acostumbrado a jugar y que son la antítesis de mi juego, dado que juego habitualmente a 10 o 20 minutos. Pero incluso después de jugar estos juegos, me sentí algo extraño volviendo a jugar a 20 minutos, por lo que de nuevo volví a comprender lo del "Just Effort". 

Jugando a 20 minutos después de haber jugado el día anterior tantas horas a 1, me hizo comprender varias cosas. Me costaba concentrarme, y es más: me costaba mantener la concentración durante tanto rato. Es cierto: realmente el jugador que juega una hora a 1 minuto, mantiene una concentración elevada durante una hora: ¿por qué no iba a poderla mantener durante 40 minutos en un único juego? la respuesta psicológica pienso que es precisamente esa: porque el incentivo de los juegos a 1 minuto es empezar uno y otro con energías renovadas, mientras que un juego largo termina por desesperar a jugadores ansiosos que necesitan resultados inmediatos. Hay cierta ansiedad aquí: como he comentado en otras entradas, jugando a 1 minuto la ansiedad sobre si una determinada jugada o secuencia funciona, se satisface casi en el acto, mientras que una jugada a 20 minutos, puede tardar en surtir efecto. 

Así fue como jugando a 20 minutos, me di cuenta de que me costaba pensar durante el turno del rival, me desconcentraba. En un momento me levanté a cerrar la ventana, miré por la calle y al sentarme estaba desubicado y ni me acordaba con qué discos movía yo. El esfuerzo justo era más difícil de mantener a 20 minutos que a 1. Las partidas largas posteriores a juegos a 1 minuto se asimilaban más a lo que eran juegos de Eothello que a una partida real. Mi juego se vio empeorado sustancialmente y mi concentración se vio perjudicada. Tras unos días jugando, de nuevo volví a coger el ritmo, pero me di cuenta de que sencillamente dicho jugador confirmó varias teorías que ya había contrastado charlando con otros jugadores: los juegos a 1 minuto no son juegos relativamente acertados para valorar el verdadero nivel de un jugador de othello.

viernes, 19 de enero de 2018

Problemas de othello Japan - 11

Capítulo 11: Trampa de paridad


Si somos negras y pretendemos acabar el juego, debemos buscar que negras mueva 2 veces. Lógicamente, que blancas mueva 2 veces es otra opción (e incluso 4 veces) pero no parece también lógicamente muy ventajoso. Así que para conseguir mover 2 veces todo lo que tenemos que hacer es dejar una región con todos los discos fronterizos del color del rival, en este caso de blancas. Esto no se cumplirá siempre, ya que dependerá de cómo estén repartidas las otras regiones, (a continuación lo explicaré). Podemos conseguir así la trampa de paridad, moviendo nosotros 2 veces y terminando el juego. 

En el problema que presento, esto se da en la región inferior izquierda: blancas no puede mover, por lo que podemos pensar confiados que tenemos la solución en esa zona. Si fuera impar, nos quedaría por arriba otra zona impar, por lo que sería un éxito. Pero como vemos arriba a la izquierda, la zona es par, por lo que en cuanto movamos en esa región, blancas acabará y estaremos forzados a penetrar en el área blanca. 

Sin embargo y como ya comento en el vídeo, la opción es la contraria: que blancas mueva 2 veces para terminar nosotros el juego. En este caso el disco de F7 parece interesante. Si antes he comentado (y he marcado en azul) que para conseguir nosotros mover dos veces debe existir una zona del rival con todos los discos de frontera de su color, lo contrario también sirve si nos interesa que el rival mueva dos veces. Es decir: podemos aplicar la trampa de paridad en el sentido contrario. No suele ser correcto, ya que le damos al rival la ventaja de hacernos un "run-out", hacer que el mueva 2 veces, pero en este caso, lo es. Descartada e imposible la opción de que nosotros movamos 2 veces, el flotador a la desesperada en nuestro naufragio othellístico en este juego llega de la mano de una trampa de paridad de este estilo. Así que justo lo que tenemos que hacer es dejar una región con todos los discos de frontera de nuestro color, para que el rival, (en este caso blancas) mueva 2 veces y así terminar nosotros el juego. (Resulta evidente que como norma general esto no funciona si somos blancas). De manera que en este caso F7 cobra un especial protagonismo al ser el disco que volteándolo dejamos una región toda negra; la inferior derecha.  (Es cierto que blancas puede optar por no mover 2 veces, aunque no suele ser lo correcto y no he comprobado si el resultado es el mismo si no lo hace, de todas formas como concepto me sirve).

Sin embargo el movimiento en F7 no es tan obvio y este problema requiere de un previo movimiento realativamente brillante, que consiste en jugar A2 para ir "preparando el terreno" en tu hipotética diagonal en B7, pero todavía no la ejecutas. Primero amarras el interior del norte saliendo por el lateral izquierdo. Ahora blancas no tiene más remedio que escoger entre lo malo y lo peor, y lo malo es conseguir el lateral izquierdo. A continuación y con un poco de lógica, podemos ver ya la sencilla trampa de paridad, donde jugando en B7 volteamos F7 y ya tenemos pista libre para terminar el juego. En este punto podemos contar si nos quedan 5 minutos, o podemos intentar esta trampa, que nos dará la partida. Pero incluso sin conociemientos teóricos de paridad en este punto del juego podemos "localmente" ver que cualquier otra opción deja con el sur ganado para blancas y con una más que intuitiva derrota para negras. Así que no nos queda más remedio que dejar que blancas mueva 2 veces. No obstante y como suele suceder en el othello: la posición final es sencilla pero para llegar a ella antes hemos tenido pienso yo que preveer la trampa de paridad, aunque tal vez pensando en ejecutar de forma correcta la jugada en A2 para ganar el interior, nos puede salir "de chiripa" el juego perfecto. Sin embargo las trampas de paridad, al menos personalmente, son algo que prefiero buscar y que no me gusta verlas "por sorpresa". Poderlo preveer y adoptar jugadas en base a ello potenciará muchísimo nuestro juego en el juego final.

miércoles, 10 de enero de 2018

La obsesión y el othello - Parte II

Identificar el problema

Parte I: "En esta primera parte he tratado de desmentir dicha aseveración. Estar obsesionado por el juego, es malo. Más adelante entraré a debatir sobre si únicamente estando obsesionado se consigue ser el número 1 del mundo (en principio no lo creo). En la próxima parte comentaré los principales síntomas que pueden indicar que estamos obsesionados, para que seamos capaces de identificar el problema. Sin embargo, en los temas mentales es de crucial importancia reconocer el problema. Reconocer dicha obsesión. Si ni siquiera se reconoce el problema, es prácticamente imposible llegar a solucionarlo. Cuando empecemos a ser conscientes del problema, podremos empezar a solucionarlo o a controlarlo. Pero si ni siquiera lo queremos reconocer, quizá la obsesión desborde nuestro cerebro tarde o temprano, como el agua que entró en el Titanic y terminó por hundirlo, mientras los violinistas seguían tocando."

El problema más inmediato que implica la obsesión es cierto estrés, asociado al incumplimiento quizá de tareas habituales más importantes que el othello. El pensamiento de poderlas hacer después, cobra fuerza en este punto. A nivel personal, recuerdo con cierto cariño en mi último año de universidad por allá el 2013.. llegar 10 minutos tarde a clase por jugar varias partidas de othello. El componente no tanto obsesivo sino lúdico que tienen todos los juegos, hacen el resto. Hacen que se mezcle obsesión con ganas de jugar, y realmente a nivel interno ni siquiera sabes o eres consciente de que estás empezando a tener un problema. 

Recuerdo cuando me contaron el caso de un muy buen jugador. Un jugador de sobre 2000 puntos de Elo en Playok había caído derrotado más de 20 veces seguidas contra otro jugador de más puntuación que él. Yo jugué con el jugador que había perdido 20 veces seguidas y creo que me metió un parcial de 10 a 2 o 9 a 3. Durante esos juegos estuvimos hablando y me comentó el modus operandi de su rival, un Gran Maestro de al menos 7 dans: Se levantaba por la mañana, procedía a estudiar 4 horas al othello. Lo hacía en papel, memorizando secuencias de aperturas. No jugaba ninguna partida, simplemente se memorizaba secuencias y más secuencias desde la apertura durante esas 4 horas. Las 4 siguientes horas del día las utilizaba realizando problemas de juego final, también con el Zebra o en papel. Posteriormente pasaba las siguientes 4 horas del día jugando en Playok. Por último, 4 horas más analizando todas esas partidas (o casi todas) para detectar fallos. Ese era su día a día. 

Resulta muy difícil de imaginar un día a día así en una persona que no esté obsesionada por el othello. Deberíamos preguntarnos: ¿a partir de qué momento dicho jugador decide autoimponerse ese horario? ¿está disfrutando realmente con eso? ¿son sus ansias de ganar un Campeonato mundial tan grandes que hace que lo apueste todo en su vida a ello? Es evidente que esa programación en 4 bloques de 4 horas, le dejan 8 horas para dormir y 16 para el othello. Se puede deducir con cierta lógica que dicha persona no trabaja. De lógica también podemos simplemente dar por hecho que su nivel es tremendamente potente. ¿Acaso podemos nosotros compararnos con él si no hacemos lo mismo? De hecho, si él no fuera mejor que nosotros después de llevar años aplicando dicha rutina, es que realmente él es tonto... y eso es lo preocupante. Las derrotas para estos jugadores son muchísimo más dolorosas que para nosotros. La obsesión no solo pinta un papel negativo en nuestro día a día, sino que tiñe cada derrota de un cruel sarcasmo. Supongo que estas personas creen, (con cierta razón) que no deberían perder ciertos juegos o cometer ciertos errores porque simplemente los han trabajado o estudiado, y el hecho de comprobar que son humanos y que incluso aun así fallan, les puede crear una sensación muy negativa.

Algunos jugadores expertos pintan las derrotas como lo debemos hacer todos: Es un juego y a veces se pierde. Punto final. En el othello, al contrario que en el ajedrez, los Grandes Maestros pueden perder contra aficionados. Eso hace grande al juego, eso hace que valga la pena. E insisto: imaginémonos que llevamos semanas trabajando una apertura para batir a un rival en un torneo presencial. Llega el día clave, aplicamos la apertura trabajada y perdemos igual, ¿acaso no nos sentaría peor que si en cambio no hubiéramos estudiado nada? 


Otro día explicaré cómo enfrentarse a la derrota. Pero resulta evidente que la obsesión no es buena, incluso aunque mejoráramos nuestro juego de una manera tremenda. Aquí comparto una captura del amigo Max, donde también por alguna razón decide quedarse practicando toda la noche antes de un torneo. ¿Realmente merece la pena? ¿Acaso va a poder potenciar más su nivel jugando toda la noche? Al final creo que los jugadores pierden la conciencia de lo que es el juego o un evento como un sitio donde se va a disfrutar y donde se va a conocer a gente y a pasar un rato agradable. 

Es cierto, a todos nos ha pasado llegar a un examen de la universidad o del colegio o de cualquier cosa y sentir la tentación de minutos antes, repasar los apuntes por si entra eso que no te sabes. Os puedo garantizar que en la mayoría de casos no vale la pena. Quizá no sea muy buen jugador de othello, pero creo que soy bueno estudiando. Lo que tú estudias, especialmente para un examen complejo, lo acumulas a través de un estudio de varios días. En el fútbol hay una ley no escrita elaborada por los italianos que dice: "no intentes ganar en 1 minuto lo que no has podido ganar en 90 minutos". De ahí que muchos equipos pacten inconscientemente una prórroga en partidos importantes cuando falta poco para que termine el juego. Lo contrario puede implicar una contra por parte del equipo rival debido a errores inesperados. En este tipo de asuntos pienso lo mismo: Ni vas a poder aprenderte en 5 minutos lo que debiste estudiar durante 10 horas ni vas a poder mejorar en el othello en un día lo que no has mejorado en meses. Tu nivel de othello, como casi todo en la vida, sube progresivamente y a poco a poco, y vas más despacio aprendiendo cuanto más experto te haces. Ni tiene sentido obsesionarse con estudiar el juego en profundidad días antes ni mucho menos durante el descanso para comer durante un torneo oficial. ¡Disfruta! ¡Conoce a gente! ¡Habla! ¡Come! Deja el ordenador a un lado y el análisis, ya tendrás tiempo de analizar los errores al día siguiente en tu casa cómodamente en tu sillón cuando estés solo tomando una taza de café... y ahora disfruta del evento de othello como solo él se merece. ¡No dejes que la obsesión se apodere de ti!

¿Hasta qué punto es dañino entonces? ¿cuando perdemos el empleo por culpa del othello? ¿cuando no podemos mantener una conversación en un torneo por revisar la partida posteriormente? Tratando de establecer un criterio horario, creo que hay un número de horas a partir del cual podemos "rebasar la línea". Evidentemente, es un dato muy subjetivo, pero aun así, paradójicamente objetivo. Debe existir un número de horas a partir del cual la obsesión hace mella en nostros. Siempre recuerdo aquí a los boxeadores. Lo he comentado otras veces: un boxeador de 20 y pocos años recibe un puñetazo y no le afecta igual que cuando tiene 30 años. El mismo golpe, 10 años atrás, le afecta más. Se dice en el argot del boxeo que el boxeador va metiendo en una cajita todos los golpes que recibe durante su carrera, y que llega un punto que esa cajita simplemente estalla o no puede retener más golpes, momento en que dicho boxeador debe retirarse. 

Psicológicamente, (e incluso psiquiátricamente), está demostrado que el cerebro no puede soportar demasiado estrés durante demasiado tiempo. Termina por colapsar. Estrés, depresión, insomnio o psicosis, son, (de menos a más) los síntomas más negativos de un cerebro que busca a la desesperada una salida a esa situación. No es casualidad pues, que en la antigua tortura china, los ejecutados se desmayaban y perdían el conocimiento, cuando el cerebro no podía soportar más tensión. En la vieja tortura española de la bella durmiente, (torturar a un preso sin dejarle dormir durante días) la muerte se producía por suicidio del reo al no poder soportar esa situación. Estudios demuestran que ese tipo de torturas mentales eran las más dolorosas con diferencia, superiores a cualquier otra cosa física que nos podamos imaginar. Es importante tener esto en cuenta, porque nos ayuda a hacernos una idea de como el cerebro trata de escapar de determinada situación, incluso aunque no nos demos cuenta de ello. El papel que juegan los fármacos hoy en día, maquillan pero no solucionan el problema, la obsesión por el othello no es buena, la obsesión en general, no es algo de lo que alguien deba enorgullecerse. Otro apunte: jugadores obsesionados son candidatos a ponerse extremadamente nerviosos en un evento presencial, motivo por el cualo directamente no participan. Les frustra demasiado ver que su nivel baja en una partida en vivo, no lo comprenden y directamente la contradicción se apodera de su inconsciente: por un lado juegan y juegan más y más partidas online, pero por otro no sienten un especial interés por hacerlo en vivo. Esto es negativo para el othello en general. (En unos meses la tercera parte).

viernes, 5 de enero de 2018

Tipos de jugadores de othello - Parte I


El otro día estaba jugando en Reversi wars y me tocaron varios jugadores seguidos de 1700 puntos. Tras ganarles con varios abandonos, me soltaron a los Miuras, como si se tratara de un encierro de San Fermín, 3 "pura cepa" de más de 2300 puntos de Elo fueron a por mi sin piedad y me destriparon vivo. Esa situación a menudo sucede en Reversi wars. ¿Qué broma es esta? ¿Lo de wars es literal? No comprendo por qué te emparejan a veces con rivales tan duros, ¿es culpa mía por ganar previamente a los anteriores? ¿No podrían digamos emparejarme con un jugador intermedio de mi misma puntuación (1900)?

Entonces me puse a mirar partidas y resulta que prácticamente hay más jugadores de más de 2100 puntos de elo, que de 1900. Hay como un "vacío" en esa puntuación, y aunque hay bastantes jugadores, Reversiwars es un sitio excelente porque también hay jugadores de primerísimo nivel. Por otro lado, hay bastantes jugadores de 1700 puntos con varios dans, que en teoría otorga el grado de "Maestro".


Y es que si algo deducí hace un tiempo, es que llega un punto en que el camino del jugador de othello toma 2 posibles direcciones. Por un lado, ciertos jugadores sienten que no pueden competir con rivales más duros, por lo que finalmente se retiran paulatinamente (desgraciadamente) del panorama del othello. Las derrotas les frustran y ante esa impotencia o incapacidad de batir a ciertos jugadores, van jugando menos. No les apetece. Es comprensible. No puedo afirmar que sean un porcentaje u otro, subjetivamente hablando apostaría por un ratio superior al 50%. He revisado datos de partidas del WOF y son muchos los jugadores que juegan de forma continuada durante un rango de años para después desaparecer. Jugadores que cosechan parciales de 4 torneos al año desde el 2003 hasta el 2007, van reduciendo posteriormente su presencia en los mismos. Es cierto que el othello al ser un juego al que nadie se dedica profesionalmente, evoluciones importantes en la vida de dichos jugadores lastran quizá su progreso y terminan por hacer que jueguen menos al juego. Parece que el othello se nutre de nuevos jugadores, más que de ciertos jugadores veteranos.

Por otro lado, llega un punto en que un jugador experto se da cuenta de que puede realizar nuevas jugadas y de que puede progresar en el juego. Es el otro camino. Quizá el camino de no ver en la derrota un fracaso sino de tratar de pasar una jornada agradable jugando al othello. Algunos jugadores hallan la motivación tratando de difundir el juego, como puede ser mi caso al redactar este blog. Otros son conscientes de que progresan más despacio porque no analizan las partidas, pero prefieren disfrutar del juego y no preocuparse por nada más. Fomentar el othello debe ir en la línea de trabajar estos puntos, de profesionalizar las instituciones y de incentivar la participación de esos jugadores veteranos que tal vez piensan retirarse y preguntarse si no pueden o no les apetece participar en un torneo. Ganar nunca debe ser una obligación.

lunes, 1 de enero de 2018

EGP Madrid 2015 - Parte II


Más que comentar partidas y jugadas, cuyo rival podría no estar a favor de que se hagan públicas dichas partidas, prefiero ir comentando aspectos formales, cosas que me llamaron la atención o nuevas que aprendí durante ese evento. Mi intención con este tipo de artículos, si no se ha notado ya en series anteriores, es simplemente mostrar la amabilidad de dichos eventos y a través de ellos relatar mi experiencia e incentivar a que nuevos jugadores se animen a participar. "Es que no soy muy bueno", es la típica excusa de ciertos jugadores, ¿acaso yo sí lo soy? Lo importante es disfrutar en estos eventos, pasar el día jugando en tablero físico a algo a lo que solemos jugar online. Creo que tiene sentido y toda la lógica del mundo. Así que en estos artículos comento algunas cosas sobre los eventos tratando de respetar en la medida de lo posible los datos personales de terceros jugadores.

No recuerdo si entonces ya existían las partidas xot, sí recuerdo que poco después empezaría a jugarlas. Son nefastas para mejorar nuestro juego inicial. Siempre he opinado que son más útiles para jugadores muy experimentados que ya se conozcan muchísimas aperturas y que por tanto el juego ordinario les aburra. No es desde luego, mi caso. Jugar muchas partidas xot hace que pienses cosas raras cuando el rival trata de variar su apertura buscando un medido -2. 


Por lo que respecta a mis aperturas, en varias de ellas busco a propósito un -6. Soy así de tonto, me gusta dar la nota y arriesgar mucho al inicio. Ese es el motivo por el cual en ocasiones me haya planteado incluso abrir en paralelo con blancas (que es un -6 inmediato). Algunos jugadores (muy pocos) me han comentado que el Zebra no es incluso fiable, aunque yo le doy un 99% de credibilidad, que ya es mucha. El problema de hacer el paralelo con blancas es que las opciones con negras son relativamente evidentes, como muestro en este vídeo. No solo negras puede renunciarte a entrar en tu juego sino que a menudo terminas desviándote involunariamente a un -9 o más puntos de diferencia, algo prácticamente irremontable en una partida a 20 minutos contra un buen jugador. Es de lógica supongo que de primero de Reversi que si empiezas con un -6, un error tuyo te va a penalizar más que si empiezas con un -2 (de ahí la popularidad de aperturas como la Comp'Oth). Aun así a mi me gusta hacerlo porque tengo muy bien estudiadas varias secuencias y me es cómodo. Conozco jugadores que conscientemente hacen un -12 en la apertura, pero es que llevan años haciéndolo y para ellos es algo súmamente cómodo y les es extraño cambiar ese hábito. A mi me pasa un poco igual, doy prioridad al disfrutar antes que al ganar. 

Y con esa mentalidad me planto en mi segundo EGP. No recuerdo aprender ninguna jugada nueva, igual que en el 2013 aprendí a hacer "la vaca" creo que con negras, en este EGP no vi ninguna apertura en especial que me llamara la atención. Sí que observé que varios jugadores jugaban algunos juegos de 5 minutos de calentamiento antes de empezar el torneo en serio. Yo me pregunto: ¿utilizan las mismas aperturas en esos juegos que en los posteriores? Siempre he pensado que en un evento donde juegas hasta 9 partidas al día de 25 minutos, no es muy aconsejable quizá jugar algunos juegos antes. Básicamente porque te puedes terminar cansando. Esto me recuerda a los magos de los juegos de Rol, que tienen Poderes Mágicos limitados. De manera que no veo la necesidad de forzar ni aunque sea un poco la concentración jugando más juegos de los necesarios durante un evento así (es distinto si ya hemos sido eliminados). He dicho que no le doy prioridad a ganar, no que no me importe no ganar, y creo que a todos nos gustaría al menos, ganar un juego. Pero aunque no ganemos, nos gustaría hacerlo bien, por lo que con ánimo de hacerlo bien, creo que jugar de más puede perjudicarnos en un evento así. Especialmente para mi, que tengo otras obligaciones diarias y no soy un jugador que incluso en mi casa y en tiempo de ocio dedique más de 2 horas al día a jugar al othello. Por ello no estoy acostumbrado a jugar durante tantas horas, y un torneo a veces es algo así como un evento de resistencia. No es sorprendente de hecho que los juegos de las rondas finales sean algo más rápidos que los iniciales. Muchos estamos ya cansados. Mientras en mis primeros juegos que perdía seguro en el 2015 trataba de intentar perder por menos discos, en los juegos finales simplemente me daba igual perder por 21-43 o por 14-50. Creo que es una falta de negligencia por mi parte que me debo proponer mejorar, pero que evidentemente el hecho de jugar juegos informales fuera del torneo conlleva este tipo de cosas, aunque en Madrid creo recordar que no jugué ninguno. Tampoco en Barcelona. Nadie me lo propuso y yo estaba tan entusiasmado con las partidas actuales en juego, que tampoco me lo planteé. Tal vez algunos jugadores piensan lo mismo que yo y prefieren no jugar juegos informales mientras dure el torneo.Tengo claro que el cerebro es algo así como un músculo, y que el usarlo demasiado provoca cansancio y un decaimiento de su rendimiento, (no es casualidad que tengamos que dormir varias horas a diario para descansar). Imaginemos que vamos a un torneo de othello después de estar trabajando todo el día, es evidente que no rendiríamos igual. Es posible que incluso no disfrutáramos igual los juegos, lo cual ya en si mismo me parece suficientemente importante como para no hacer cosas que puedan perjudicarme durante el evento. Si viajo en AVE: no aprovecho las 3 horas del viaje para  estudiar ni siquiera nuevas aperturas, simplemente me relajo y trato de dormir.

Durante aquel evento hubo algo de confusión sobre cuando se disputaría la final. Además en ocasiones se apuntan jugadores y luego no aparecen, por lo parece que hay dudas sobre si esperarles, aunque la espera podría retrasar todas las partidas de todo el torneo, por lo que no suele ser una opción factible, puesto que los jugadores deben estar 1 hora antes de iniciar el torneo, y esa hora es la espera. Evidentemente si cierto jugador puede avisar de que llega tarde, se le puede esperar. Creo que se solucionaría en parte si se cierran las inscripciones un par de días antes del evento, y si se hace el pago por transferencia bancaria antes de que se celebre el torneo. Esa medida sería quizá más profesional, aunque como somos pocos jugadores, cualquier cambio de este tipo puede afectar a la participación y las organizaciones son más conservadoras en este aspecto.